11 de mayo de 2012

A tu revés



Decí que las yemas de mis dedos guardaron
el recuerdo del roce a tu espalda…
Decí  que te acariciaron, estas yemas memoriosas,
que a veces añoran tu piel.
Decí que el olvido no es físico y el tacto es eterno.

Entrelunas, 2008

4 comentarios:

  1. Paulita, lo que faltaba de tí... aplauso cerrado. Espero con ansias tus entradas. Besos

    ResponderEliminar
  2. Gracias a las dos! Lindas!
    Confiemos en la continuidad de las entregas,
    lo que ven las niñas de mis ojos (título en homenaje a la bella Alejandra Pizarnik).

    Besos!

    ResponderEliminar